El conocimiento más asentado en relación a la respuesta del volumen sistólico (VS) al ejercicio de intensidad creciente ha sido y es, que el VS alcanza su valor máximo a intensidades correspondientes al 50-60% VO2max, y posteriormente no aumenta sus valores hasta alcanzar la máxima intensidad de ejercicio, donde puede incluso descender. Algunas investigaciones previas (Gledhill y col, 1994; Zhou, 2001) mostraron que el VS en algunos atletas de resistencia aeróbica no llegaba a alcanzar una meseta, sino que se incrementaba hasta el ejercicio máximo.
Recientemente, Wang y col, 2012 (Int J Sports Med -epub ahead of print- 11-mayo, 2012), han observado también que tanto en mujeres atletas de resistencia aeróbica, como en mujeres entrenadas moderadamente, no se alcanzaba una meseta en el valor del VS, sino que aumentaba hasta el esfuerzo máximo.
Estos hallazgos son muy interesantes, y abren un interesante debate sobre la respuesta cardiaca al ejercicio. En la actualidad, el conocimiento más ampliamente difundido y enseñado en las universidades, es que el VS alcanza una meseta al 50-60% VO2max no aumentando más con la intensidad del ejercicio. Este cuerpo de conocimiento quizás deba ser revisado.